Las elecciones presidenciales de Estados Unidos de 2024 representan un punto de inflexión con implicaciones profundas tanto a nivel doméstico como internacional.

Los temas clave en juego, abarcan desde la estabilidad de la democracia estadounidense hasta las relaciones geopolíticas y la política interna. A continuación, desglosamos los aspectos más destacados y sus posibles impactos en los diferentes ámbitos.

ACTUALIDAD MERCADOS

EMILIANO GÓMEZ

11/3/20245 min read

1. Democracia en Riesgo

Uno de los temas principales es la percepción de que la democracia estadounidense está en riesgo. La retórica y las acciones de ambos candidatos reflejan posiciones opuestas en cuanto a la preservación o erosión de las instituciones democráticas. Este contexto plantea interrogantes sobre la estabilidad institucional y el respeto a los procesos electorales y legales, aspectos que no solo afectan a Estados Unidos, sino que también podrían influir en sus relaciones internacionales. Una democracia debilitada en EE. UU. podría ser vista como una oportunidad para potencias rivales, como Rusia y China, para expandir su influencia y cuestionar la legitimidad de los valores democráticos occidentales.

2. Política Fiscal y Social: Recortes de Impuestos y Ayudas

El debate sobre la economía se centra en políticas fiscales divergentes. Mientras que el candidato demócrata (presumiblemente Harris) promovería ayudas y subsidios para enfrentar la desigualdad económica, el candidato republicano (presumiblemente Trump) favorece recortes fiscales y la reducción de la intervención del estado. Estas posturas reflejan una dicotomía que impactaría tanto en la clase media como en la inversión pública. Además, una política de recortes podría reducir los fondos disponibles para programas sociales y ambientales, exacerbando tensiones internas y afectando indirectamente a socios comerciales al cambiar la dinámica del consumo y la inversión estadounidense.

3. Relaciones con Israel: ¿Diplomacia o Carta Blanca?

El artículo destaca cómo la política exterior hacia Israel podría variar drásticamente. Mientras que una administración de Harris probablemente continuaría una política de diplomacia cautelosa, un retorno de Trump podría dar “carta blanca” a Israel en sus decisiones regionales, afectando la estabilidad en Medio Oriente. Esta postura podría enardecer tensiones con Irán y otros actores, poniendo en riesgo la seguridad en la región y los precios del petróleo, de los cuales dependen tanto Estados Unidos como Europa y Asia. Además, una postura unilateral en favor de Israel podría alienar aún más a los países árabes y a la comunidad internacional, complicando esfuerzos diplomáticos multilaterales.

4. Ucrania: La Búsqueda del Mal Menor

La guerra en Ucrania sigue siendo un tema candente, y el resultado electoral determinará el nivel de apoyo estadounidense. Una administración demócrata seguiría apoyando a Ucrania con asistencia militar y financiera, mientras que una administración republicana podría reducir dicho apoyo, con el objetivo de concentrarse en problemas internos. Este cambio podría darle ventaja a Rusia en el conflicto y llevar a una reconfiguración del equilibrio de poder en Europa, afectando la seguridad de los países de la OTAN y las relaciones transatlánticas.

5. Relaciones con la Unión Europea

La política comercial y las relaciones diplomáticas con la Unión Europea también están en juego. Trump ha amenazado con imponer aranceles a las importaciones europeas y reducir subsidios verdes para las empresas estadounidenses, lo que podría tensar aún más las relaciones con Bruselas. En contraste, una presidencia demócrata podría seguir alineada con la política energética europea y trabajar conjuntamente en la transición verde. Este enfoque tiene profundas implicaciones para el comercio transatlántico y la competitividad industrial de ambas regiones, especialmente en sectores sensibles como el automotriz y el tecnológico.

6. Derechos Reproductivos: El Riesgo del Aborto

El derecho al aborto sigue siendo una cuestión divisoria. La candidata demócrata ha prometido proteger los derechos reproductivos a nivel federal, mientras que el candidato republicano podría revertir esos derechos, empoderando a los estados conservadores para restringir el acceso al aborto. Esta dinámica no solo influye en la política interna, sino que también tiene eco a nivel global, afectando el liderazgo de EE. UU. en temas de derechos humanos y convirtiéndose en un punto de referencia para movimientos conservadores en otros países.

7. Inmigración: Hacia una Postura más Dura

El tema de la inmigración es otro aspecto crucial. Ambos candidatos parecen inclinados a una política más estricta, aunque con diferentes enfoques y grados de dureza. Trump ha prometido una “deportación masiva”, mientras que Harris apoya una postura más regulada pero con controles adicionales. Una política migratoria más dura podría exacerbar tensiones en la frontera con México y afectar la dinámica laboral en sectores que dependen de la mano de obra inmigrante, con implicaciones para la economía de Estados Unidos y de los países vecinos.

8. Taiwán y la Amenaza China

La política hacia China y, en particular, hacia Taiwán, sigue siendo un tema sensible. Trump ha adoptado una postura confrontativa hacia China, utilizando aranceles y sanciones, mientras que Harris continuaría una política de contención más cautelosa. En el contexto de la creciente tensión en el estrecho de Taiwán, cualquier política que aumente la presión sobre Beijing podría llevar a represalias económicas y a una militarización de la región, afectando a la industria de semiconductores y a la estabilidad de las cadenas de suministro globales.

9. Derecho a la Posesión de Armas

El derecho a portar armas sigue siendo una cuestión profundamente divisiva en EE. UU. Harris ha propuesto regular el acceso a armas de asalto, mientras que Trump apoya el derecho absoluto a la posesión de armas. Esta polarización afecta la seguridad interna y es un reflejo de las profundas divisiones culturales que caracterizan al país. La política de armas influye no solo en la seguridad pública, sino también en la percepción internacional de Estados Unidos como un país donde las armas son accesibles y la violencia armada es una amenaza recurrente.

10. Cambio Climático: Acción o Negacionismo

Finalmente, la postura de EE. UU. frente al cambio climático se perfila como un tema crítico. Harris promete continuar con políticas de reducción de emisiones y transición energética, mientras que Trump podría reactivar políticas de negacionismo climático y fomentar la explotación de combustibles fósiles. Esta diferencia influiría en la posición de Estados Unidos en el Acuerdo de París y en sus relaciones con países que lideran la agenda verde, como la Unión Europea. La acción climática o su ausencia no solo afecta al medio ambiente, sino que también redefine las alianzas globales y el liderazgo en tecnología limpia.

Reflexión Final

Las elecciones de 2024 en Estados Unidos representan un cruce de caminos donde decisiones clave pueden alterar el orden político, económico y social tanto a nivel nacional como global. La posible reelección de Trump o el ascenso de Harris dibujan futuros distintos: uno caracterizado por políticas unilaterales y nacionalistas, y otro por una diplomacia multilateral y una agenda progresista. La interrelación entre estos temas refleja que las decisiones tomadas en Washington tendrán repercusiones en todo el mundo, desde la estabilidad de las democracias occidentales hasta la lucha contra el cambio climático y el equilibrio geopolítico en Asia y Europa.